Descripción del caso.
Pienso que el problema que tuve hace ya algunos años no va a ser entendido por nadie, aunque mi psicólogo me dijera que se presentaba con bastante frecuencia en ciertas personas con tendencia a la dismorfofobia.
Mi vida giraba alrededor de mi nariz. No me gustaba mi nariz. Sufría con mi nariz. Mirarme al espejo era una constante en mi vida. No salía apenas de casa. Solo lo justo. Ir a la Universidad y de vuelta a casa.
Nadie me hablaba de mi nariz. En casa, mis padres me decían que era normal, pero a mi no me valía lo que decían. A mi me parecía horrible y mi sufrimiento por ello era insufrible.
Tanto me vieron padecer mis padres que me llevaron a un cirujano plástico, a ver si me convencía de que mi nariz era completamente normal. Por supuesto que no me convenció y yo le pedí que me operara. El cirujano, muy honesto, me dijo que no me apreciaba nada raro en mi apéndice nasal. El no lo apreciaba pero yo sí. Ante mi insistencia y con el consentimiento de mala gana de mis padres, practicó una intervención ¿de que?. A mí lo que me desencajaba es que yo veía una pequeña punta, para mi no era pequeña, sino gigantesca al final de la nariz. Mi nariz terminaba en punta y yo no lo soportaba. La intervención del cirujano era eliminar la punta y así lo hizo.
No se terminó mi pesadilla con ello. Con mi nueva nariz, me gustaba menos que antes. Ahora la quería con punta y pedí de nuevo que por favor volviéramos al estado anterior. Ahí hubo una oposición drástica por parte de mis padres y del propio doctor que recomendó a mis padres que me pusieran en tratamiento psicológico. En un principio yo no accedí, pero al final consentí en ello, ya que a una nueva intervención se opusieron, como digo antes, mis padres.
Hoy en día , han pasado, cinco años y ni yo mismo puedo entender, como pude tener entonces esas sensaciones de malestar conmigo mismo y con los demás, ya que el contacto con amigos, compañeros de clase, incluso mi propia familia me acrecentaban el sufrimiento, porque pensaba que los demás me toleraban solamente por caridad.
¿ Cómo es posible que pudiese tener una mente tan retorcida?. Cuando ahora veo fotografías de mi nariz tanto con punta como sin punta, me parece imposible haber sufrido como sufrí.
¿A alguien le ha ocurrido o le ocurre lo que me sucedió a mi? Creo que no y así lo espero.