Este trastorno se caracteriza por la aparición de un conjunto de síntomas de ansiedad que tienen lugar después de la exposición a un acontecimiento altamente traumático. Estas alteraciones duran más de dos días, hasta un máximo de cuatro semanas y aparecen el primer mes, desde que se presenta el evento traumático . (Si durasen los síntomas más de cuatro semanas, el diagnóstico sería “Trastorno de estrés postraumático).
Al igual que en el trastorno de estrés postraumático , el factor estresante, que produce este trastorno, reviste suma gravedad. Los ejemplos más típicos de este tipo de situaciones son:
- accidentes
- desastres naturales (terremotos, inundaciones, huracanes…)
- atentados
- inesperadas muertes de alguien cercano
- asaltos, delitos o violaciones
- abusos sexuales o físicos durante la infancia
- secuestros
El acontecimiento traumático, suele ser reexperimentado en forma de imágenes, sueños, pensamientos etc. con la sensación subjetiva de estar reviviéndolos de nuevo y con un intenso malestar al exponerse a situaciones que puedan recordar al suceso.