La característica fundamental de este tipo de trastornos es el fracaso en resistir la tentación de llevar a cabo un acto que es perjudicial para uno mismo o para los demás.
Normalmente la persona, antes de realizar el acto, tiene una sensación importante de tensión ; en el momento de llevarlo a cabo, siente un gran placer y después surgen una serie de sentimientos de culpa y autorreproches .
Las personas que tienen este tipo de trastornos suelen tener una baja tolerancia a las frustraciones y necesitan satisfacer su necesidad cuando lo desean, sin demoras.